Glühwein es una de las bebidas tradicionales en invierno en los países más fríos de Europa. Un vino aromatizado y especiado que se toma caliente para combatir el frío.
Sus aromas cítricos y sabores especiados a jengibre, clavo, anís o canela se potencian al calentar levemente y son una delicia para tomar en los días más desapacibles del invierno.