Se trata de un ambicioso proyecto con una superficie total de 136.000 m2 de terreno, en el cual se prevé la construcción de una bodega dotada de alta tecnología, desde la recepción de la uva hasta el embotellado. Para su localización, el equipo de Félix Solís Avantis ha desarrollado durante estos años un riguroso estudio de los territorios que componen el mapa vitivinícola de Chile.
Finalmente, la bodega estará ubicada en el Valle de Cachapoal, en la Zona central a 100 kilómetros al Sur de Santiago de Chile, región con gran variedad de suelos, y en la que abundan las variedades blancas chardonnay y sauvignon blanc, y las tintas merlot, cabernet sauvignon y carmenere. Tendrá una capacidad de producción de 30 millones de litros, y arrancará su producción en 2024, con su primera vendimia.